LECTURA DEL DIA: JOSUE 6:1-21
(Miércoles 12 Febrero 2020)
Todo gran sueño, todo buen proyecto, todo anhelo noble, siempre enfrentara resistencia, siempre se enfrentara a lo imposible a situaciones complicadas, allí se requerirá carácter, una buena actitud, fe en Dios y esfuerzo.
Es por la carencia de estas cosas que muchos grandes sueños nunca se hacen realidad. Es la razón por la que un buen proyecto, se queda escrito en un papel, pero no se pone en acción, porque se ven las dificultades que la recompensa.
Buenos anhelos solo quedan en el corazón, pero nunca se realizan por miedo.
Grandes empresas o ministerios solo se visualizan en la imaginación, pero nunca lograron la trascendencia porque no estuvieron dispuestos a lanzarse al desafío, con la confianza puesta en Dios.
Jericó era una ciudad impenetrable, grandes murallas hacían imposible su conquista y la seguridad era extrema.
Josué 6:1 dice: Ahora, Jericó estaba cerrada, bien cerrada, a causa de los hijos de Israel; nadie entraba ni salía.
Llama mi atención la frase “Cerrada, bien cerrada” ¿No te suena familiar a las situaciones que estas enfrentando? ¿Cómo está tu economía? ¡Cerrada, bien cerrada!, ¿Crees que vas a poder sacar adelante tu familia?, ¿Crees que la carrera será terminada?, ¿Crees lograr trascender en el ministerio como has soñado? Josué tenía delante de él una ciudad impenetrable que estaba “Cerrada, bien cerrada” Pero las palabras de Dios a Josué son las mismas que hoy podemos recibir nosotros.
Josué 6:2 Mas Jehová dijo a Josué: Mira yo he entregado en tu mano a Jericó y a su rey, con sus varones de guerra.
En otras palabras: Josué ¡Yo te ayudo! Y si yo hago mi parte, te toca hacer la tuya; o te di mi bendición, te toca ir por ella; yo hago lo sobrenatural, tú haz lo natural, yo estoy contigo.
¿Puedes tomar este texto como una promesa para tu vida?
Dios te ha entregado su promesa, Dios está de tu lado, no confíes en tus fuerzas, no confíes en tus habilidades, no confíes en tus conexiones o experiencia, pon tu confianza en Dios.
Quizá todo está cerrado, bien cerrado pero recuerda que Dios está contigo.
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