AYUDAME A SER UN BUEN MAYORDOMO

LECTURA DEL DIA SALMOS 24:1-10

(Domingo 2 Febrero 2020)

En la biblia encontramos en Salmos 24:1: De Jehová es la tierra y su plenitud; el mundo y los que en el habitan. Declarar que de Jehová es la tierra y su plenitud; el mundo y los que en el habitan, es hacer una declaración de que él es señor y dueño del mundo y de todos nosotros. 

Esto nos pone en perspectiva de que somos administradores y mayordomos, y no dueños; sin embargo, vivimos la vida como si fuéramos los dueños. De hecho, antes de venir a Cristo, muchos usábamos palabras como “a mí nadie me manda” o “es mi vida y que” pero cuando Cristo vino y lo reconocimos como nuestro señor y salvador, nuestras vida ya no nos pertenece, pues se la entregamos a él. 

Eso significa que no somos dueños de los que tenemos, sino mayordomos, el problema es que seguimos viviendo como dueños, creyendo que todo es nuestro, que es nuestra fuerza la que nos lo ha dado, que es nuestra inteligencia o nuestras relaciones, pero la verdad es que Dios quien nos ha dado todo, el que ha permitido las oportunidades y el que nos ha dado las capacidades. 

En 1 corintios 4:2 en la versión Dios habla y dice: ahora bien, el que recibe un encargo debe mostrar que es digno de confianza. 

¿Cuál es el encargo que hemos recibido? ¿Qué cosas nos ha dado Dios de las que somos administradores? 

La vida, la salud, la familia, los dones y las oportunidades, son algunas cosas que podemos mencionar. Entonces, ¿Cómo estamos administrando estas cosas? ¿Estamos demostrando que somos dignos de confianza? Necesitamos pedirle a Dios por cada una de estas cosas y por sabiduría para entregarle, buenas de lo que nos ha dado; cambiemos nuestra mentalidad, no somos dueños, somos administradores. 

Esto nos da mayor responsabilidad porque debemos rendir cuentas. Cuidemos la familia, cuidemos las finanzas, cuidemos nuestra salud, cuidemos nuestra vida espiritual., cuidemos las oportunidades que nos han sido dadas, y recordemos siempre que de Jehová es la tierra y su plenitud, el mundo y los que en el habitan. Él es el dueño y nosotros sus administradores.